Amanecemos con la noticia que el PRI al parecer viene de regreso y bien, la alternancia política es buena.
Lo triste del caso es la forma en la que esta alternancia se está dando, compra y coacción del voto descarada, presiones a los votantes, cientos de "camisas rojas" intimidando y un derroche de dinero al viejo estilo pero renovado y aumentado.
Y nadie me lo cuenta, yo estuve ahí entre los balazos y pedradas en Izamal, como observador electoral; las mismas mañas solo que con más dinero.
Dinero que sale de mi bolsa, de mi trabajo vía impuestos, para traer a los Cumbia Kings, a la Trevi, a Maribel Guardia, cuando preferiría becas para que esas personas brillantes que conozco no tengan que irse al extranjero a continuar estudiando o a buscar una mejor oportunidad.
Que preferiría para modernizar el campo y el campesino no tenga que aceptar $500 hoy por su voto y mañana se siga muriendo de hambre y por el resto de su vida.
Eso es lo que tiene que cambiar, el uso del recurso público, acotar en qué pueden gastar los partidos políticos y cuánto, así como Hacienda fija qué tenemos derecho a deducir, qué tenemos obligación de pagar, eso sí depende de nosotros..a trabajar!
